Asesinato del heredero al trono Austro-hungaro

En 1878, Bosnia y Herzegovina fueron ocupadas por el Imperio Austrohúngaro, anexionándoselas dicho Imperio en el año 1908. Una parte importante de la población del territorio, especialmente los habitantes serbios, se oponían a esta ocupación y deseaban la unificación del territorio, bien fuese con Serbia o con otros países eslavos. Este resentimiento es el que se halla en el origen del atentado. Las autoridades austriacas eligieron el 28 de junio de 1914, el día en que los serbios celebran el Vidovdan (una festividad religiosa importante entre los serbios de religión ortodoxa), como fecha para la visita del archiduque a la ciudad de Sarajevo. La fecha correspondía igualmente a la del décimo cuarto aniversario del matrimonio de los archiduques. El día escogido, era en definitiva el aniversario de la derrota ante los turcos en 1389 durante la Batalla de Kosovo. El viaje en ese día del Archiduque Heredero del Imperio e Inspector General de los Ejércitos era considerado, pues, por los más exaltados de la comunidad serbia como una auténtica provocación.

 

La orden del príncipe de Montenuovo de no rendir honores militares y de retirar a las tropas tuvo como consecuencia la privación para la pareja de la protección que habría supuesto el ejército. Para terminar, el error del itinerario, tras un primer atentado dos horas antes, al obligar al vehículo que conducía al archiduque y su esposa a detenerse en medio del gentío, puso a ambos justo bajo el punto de mira de su asesino, Gavrilo Princip.

 

Este fue el hecho que desencadeno la guerra en Europa, el heredero al trono austro-hungaro, se encontraba en Sarajevo, la capital de la provincia austro-húngara de Bosnia-Herzegovina, el 28 de junio de 1914 aproximadamente a las 11 de la mañana, el heredero al trono austriaco fue asesinado por un terrorista de origen serbio que servia a una banda terrorista llamada ''la Mano Negra'' un grupo terrorista de origen serbio